“Todos nacemos científicos; la magia está en conservar esa pasión intacta”

Desde siempre, la curiosidad ha sido el motor que impulsa a César de la Fuente, un científico apasionado por descubrir lo que parecía imposible. Para él, la ciencia ficción y la realidad no están tan lejos; es solo cuestión de persistir, creer en uno mismo y desafiar lo que todos consideran improbable. En su caso, la lucha contra la resistencia bacteriana —un desafío que podría dejar a la humanidad sin antibióticos eficaces— es el catalizador para emplear la inteligencia artificial en una aventura sin precedentes: recuperar moléculas antibióticas de organismos extintos, como el mamut o el perezoso gigante, para enfrentarnos a un nuevo mundo donde los antibióticos tradicionales ya no sirven.

Dice de la Fuente, que hay tres pilares fundamentales que han duplicado la esperanza de vida de la humanidad: el agua potable, las vacunas y los antibióticos. Sin embargo, el escenario es alarmante: si no se desarrollan alternativas innovadoras, en 2050 podrían fallecer tres personas por segundo debido a la resistencia bacteriana. Para que esto no ocurra, él y su equipo trabajan en un campo emergente y totalmente transgresor al que llaman “desextinción molecular”, donde la IA permitiría resucitar compuestos de eras pasadas para enfrentarse a este problema. “La biología es un código y, con el algoritmo adecuado, podemos explorar el mundo biológico como una biblioteca de datos infinita”.