Diseño y videojuegos
Carolina Jiménez García
«Muchas veces encontramos nuestras vocaciones tarde por falta de información»
La historia de Carolina Jiménez combina perseverancia, autodescubrimiento y la valentía de reinventarse. Su trayectoria nos invita a reflexionar sobre cómo a veces desconocemos que una carrera existe, y que es normal explorar distintas opciones antes de encontrar lo que realmente nos apasiona. Porque encontrar una vocación puede ser un camino que se extienda durante años, e incluso toda una vida.
Cuando le tocaba decidir, Carolina eligió arquitectura, sin demasiada convicción y sin saber que su verdadera pasión estaba en el cine. Fue tras el estreno de la primera entrega de El Señor de los Anillos y después de ver el making-of, que se dio cuenta de que el software utilizado en la producción era muy similar al que había aprendido en su carrera. Este descubrimiento la llevó a dejar la arquitectura para dedicarse a la animación y los efectos especiales. “Muchas veces encontramos nuestras vocaciones tarde por falta de información más que otra cosa, y uno no puede querer dedicarse a algo que no sabe que existe”, asegura Carolina. Esta reflexión es fundamental, ya que resalta la importancia de explorar y aprender sobre las diferentes oportunidades que muchas veces se ocultan en los lugares más inesperados.
Pero también su experiencia nos habla de que los sueños pueden cumplirse, y ella lo hizo a base de perseverancia. Después de estudiar animación envió una y otra vez su currículum al estudio que la había inspirado a cambiar de carrera, hasta que finalmente la llamaron para formar parte del equipo de El Hobbit. Y aquí llega el segundo gran aprendizaje de la vida de Carolina: “Nadie te cuenta qué pasa cuando alcanzas tu sueño. Me tocó aprender cómo reinventarme, y buscar sueños nuevos.” Y añade: “Al final, la vida son capítulos y hay que ir cerrando unos e ir abriendo otros”. Y eso mismo ha hecho.
Desde entonces ha participado en grandes producciones como Juego de Tronos, Terminator y Guardianes de la Galaxia, viajando por el mundo y conociendo diferentes culturas. Sin embargo, lo que más la enriquece es la oportunidad de colaborar con un equipo de profesionales tan diverso. “Cada departamento necesita cualidades diferentes, con profesionales vienen de mundos totalmente distintos: desde dibujantes a músicos, animadores, físicos, poetas o expertos en anatomía… lo que hace que aprendas a diario”, comparte Jiménez.
Como Carolina, el diseñador de metaversos, Edgar Martín-Blas, o la artista y animadora 3D, Paloma Vela, son muy buenos ejemplos de las oportunidades y el prometedor futuro en el diseño 3D, los efectos y, en general, el sector audiovisual dentro y fuera de nuestro país.
