“Ser médico es tener el privilegio de poder ayudar a los demás”

En el universo de la medicina, donde los triunfos son celebrados como pocos, por tratarse de la vida humana, el Dr. José Luis Zamorano, jefe de Cardiología en el Hospital Ramón y Cajal, reconoce que también hay momentos desafiantes. Pero más allá de los momentos difíciles, Zamorano comparte un secreto que alimenta su compromiso diario: “Los médicos tenemos dos nóminas: una económica y otra psicológica”. La primera es la que tiene todo el mundo, la que da ingresos corrientes, pero la segunda es la que para él representa la verdadera recompensa: “Influyes en la vida de otra persona y haces que pueda vivir mejor”.

El Dr. Zamorano comparte su visión apasionada sobre la medicina, describiéndola como una carrera preciosa que ofrece un profundo entendimiento del cuerpo humano: “Por qué enferma, cómo enferma y cómo tratar la enfermedad”. Su fascinación se extiende todavía más hacia la cardiología, su especialidad, donde los avances tecnológicos han sido asombrosos y han generado cambios sorprendentes para los pacientes. Destaca la inteligencia artificial como una herramienta revolucionaria en el campo de la salud, facilitando la interpretación de pruebas, el diagnóstico y el seguimiento de los pacientes. Y pone un ejemplo asombroso: “En Corea han sido capaces de determinar quién puede tener más arritmias monitorizando los cambios en la cara”.

Para los futuros médicos, el doctor tiene claro que tendrán que especializarse en áreas muy concretas. Serán especialistas altamente capacitados que deberán estar centrados en parcelas muy pequeñas de su campo y con un alto conocimiento de la tecnología de la que veníamos hablando.