Diseño de videojuegos
Isabel Tallos
“Lo más bonito es disfrutar de lo que te apasiona y convertirlo en una profesión”
La elección de una carrera universitaria puede parecer un momento decisivo y a veces abrumador. La historia de Isabel Tallos, diseñadora de videojuegos, sin embargo, nos sirve para entender que el mundo y las profesiones evolucionan y que lo importante es saber qué es lo que nos gusta para adaptarlo a nuestro trabajo. Su historia irradia inspiración y demuestra, que además de la pasión, aprovechar las casualidades puede ser el inicio de un viaje emocionante y satisfactorio en nuestra carrera profesional.
Para la diseñadora, crear videojuegos es construir escenarios que tienen un papel fundamental en la vida cotidiana de las personas. Los jugadores no solo pasan incontables horas en ellos, sino que conviven con la obra y también con otros jugadores, tejen comunidades y fomentan la interacción social. Según Isabel, “la magia de los videojuegos es que permiten a los jugadores interactuar entre ellos, creando un universo donde se desarrollan, hacen amigos e incluso surgen parejas”. Ella prevé que el futuro de la industria se centrará en mejorar todavía más estas interacciones.
Antes de dirigir su propia empresa de videojuegos, Isabel se dedicaba a la fotografía artística. Estudió Bellas Artes y durante años fue de exposición en exposición, hasta que se dio cuenta de que necesitaba un respiro. Y empezó a estudiar animación 3D en lo que, en principio, iba a ser simplemente un año sabático. La casualidad, sin embargo, tenía otros planes. Su hermano se estaba tomando también un descanso del trabajo y, en una comida familiar, surgió la idea. “A los dos nos encantaban los videojuegos y pensamos en hacer uno juntos, por pasar el rato” y hasta hoy. Isabel recuerda que, cuando eran tan solo unos niños, hacían figuritas de Warhammer fundiendo los balines de caza de su tío y, quince años después, “estamos nosotros diseñando Warhammer 40.000 en cartas en el mundo digital”, añade.
Quizás por esta anécdota, asegura que el estilo personal no es algo que se busque activamente, sino algo inherente que emerge de nuestras pasiones y obsesiones. Para Isabel, lo crucial es identificar aquello que está en nosotros y que nos fascina, para después desarrollarlo. Y su historia es un ejemplo perfecto. A veces esa evolución pasa por las apariciones tecnológicas que ofrecen un camino nuevo. ”Yo creía que me iba a dedicar a pintar con óleo y carboncillo y ahora me veo dibujando ogros y marines espaciales de Warhammer 40,000”, dice bromeando.
Mirando hacia el futuro, la artista subraya la importancia de la Inteligencia Artificial y cómo esta va a revolucionar no solo nuestra vida cotidiana, sino también el sector de los videojuegos. “La Inteligencia Artificial está aquí para quedarse, y debemos aprender a integrarla en nuestro favor”, aconseja. Al igual que Isabel Tallos, figuras como Gisela Vaquero y Fernando Piquer también han dejado su huella en la industria del videojuego, demostrando el amplio impacto de este sector tanto en la vida individual de las personas como a nivel económico, siendo la industria de ocio que más factura, por encima de la música y el cine.