Fisioterapia
Raquel Fernández
“La fisioterapia supone tener un reto cada día”
Raquel Fernández descubrió su vocación en su propia familia. Cuando era apenas una adolescente, nació su sobrino con síndrome de Down y, al ver cómo las terapias de atención temprana le ayudaban a desarrollarse al mismo ritmo que los otros niños, lo tuvo claro. “Entonces dije: yo quiero hacer esto”, recuerda. El siguiente impulso importante para su carrera llegó cuando ya estaba estudiando. Conoció a un fisioterapeuta con mucha experiencia que le dijo que, si iba a dedicarse a ello, tenía que ser la mejor. A Fernández le llevó un tiempo entender lo que quería decir. Pero finalmente se dio cuenta de que no se refería a “estar por encima de los demás, sino a ser la mejor para cada uno de tus pacientes”.
De eso precisamente considera ella que trata la fisioterapia. De ayudar. De hacerlo lo mejor posible para mejorar la vida de las personas. Y de hacerlo también más allá de lo que todos conocen de la profesión: los centros privados donde se tratan lesiones menores. Ese más allá, en su caso, son los hospitales. Fernández trabaja en terapias respiratorias, haciendo, entre otras cosas, lo que los expertos llaman la prehabilitación. “Hacer fisioterapia antes de una cirugía para que el paciente llegue en el mejor momento”, explica. Una disciplina que se practica desde transplantes a cirugías pulmonares y que ayuda a mejorar la vida de muchos pacientes. Incluso en ocasiones a salvarla.
Para Fernández los grandes avances médicos que están haciendo aumentar cada vez más la esperanza de vida, tienen que venir acompañados también de avances y apuestas por mejorar las condiciones de vida de las personas. Como ella misma dice: “La gente quiere vivir muchos años pero quiere vivir bien”. En este sentido, ve en la fisioterapia un gran futuro profesional. Sobre todo para gente que, como ella, desde bien joven ha tenido claro que lo que quiere es ayudar. “Tener cada día un reto y un contacto muy directo con el paciente”