En el año 2021 el sector de las energías renovables generó 92.930 empleos directos en España.
Ciudades como Madrid, Barcelona, Oslo, París, Helsinki, Londres o Nueva York están planteando un nuevo modelo de movilidad sostenible para intentar reducir el gran volumen de tráfico y la alta contaminación de sus calles. Animan al uso del transporte público, la creación de espacios peatonales y el uso de las bicicletas en sus centros urbanos y se está impulsando un cambio en la normativa medioambiental con el propósito de fomentar la economía verde y reducir al máximo los elevados niveles de emisiones contaminantes.
Es solo un ejemplo de las diversas iniciativas que ponen de manifiesto la creciente preocupación social por las cuestiones ambientales, debido a las graves consecuencias que está dejando en evidencia el cambio climático. En 2015, los estados miembros de la Asamblea General de las Naciones Unidas se comprometieron a cumplir la denominada Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que fija un plazo de 15 años para erradicar la pobreza, proteger el planeta y garantizar el bienestar de todas las personas. Para ello, se fijaron un total 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), con un total de 169 metas que establecen un conjunto de prioridades.
Para llevar acabo estos planes, tanto a nivel local como global, harán falta perfiles profesionales que tengan las habilidades necesarias en estos ámbitos, y que estén plenamente familiarizados con estas nuevas tecnologías. Se requerirá una visión panorámica de la naturaleza y los problemas medioambientales, se buscará una formación científica y el conocimiento de las herramientas utilizadas por la empresa y las instituciones para adecuar la toma de decisiones al entorno económico, político y social.
Sectores ligados a la construcción, la alimentación, el turismo, la industria o la moda están en constante cambio para adaptarse a los nuevos tiempos de transformación económica: impulsar las energías renovables, la edificación sostenible, la gestión de residuos, el ecoturismo o la agricultura y las ganaderías sostenibles. Son muchas las oportunidades laborales que se están dando actualmente en este ámbito y, en España, se estima que a corto plazo se pueden llegar a generar más de 1,13 millones de empleos si se impulsan las energías renovables, el transporte sostenible y las infraestructuras verdes.
En este contexto, la Unión Europea impulsó a finales de 2019 el denominado Pacto Verde Europeo The European Green Deal, con el propósito de impulsar esta transformación ecológica y medioambiental, al tiempo que se establece una nueva estrategia hacia una economía moderna y ecoeficiente. Además, España está recibiendo de forma escalonada ayudas millonarias procedentes de los fondos europeos de recuperación Next Generation EU, destinados a fortalecer la transición ecológica y digital. Entre tanto, figuras como la joven activista sueca Greta Thunberg o la directora ejecutiva del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente Inger Andersen están alzando sus voces al tiempo que impulsan nuevos pasos contra la crisis climática.
En nuestro país, las actividades asociadas a la protección del medioambiente y la gestión de los recursos naturales representan el 2,58% del Producto Interior Bruto. Además, el INE sostiene que la producción de bienes y servicios ambientales genera un valor económico que supera los 61.700 millones de euros en España. En 2021, este sector generó un total de 92.930 empleos directos, con un total de 3.558 megavatios renovables conectados.
Los profesionales del futuro darán respuestas a todas estas necesidades desde una perspectiva multifactorial y transversal. Manejarán aspectos relacionados con la biotecnología, la industria 4.0, el emprendimiento verde, la cooperación al desarrollo sostenible o la gestión global del territorio.
Así, para elegir una determinada carrera profesional ligada al medioambiente, es fundamental pensar el tipo de trabajo que a uno le gustaría tener.
